HOUSE M.D.

Volviendo de nuevo a las series y dejando aparcado hasta la próxima semana el cine, hoy os traigo una de las series más vistas del siglo XXI. Una serie que este año tocaba su fin tras 8 temporadas llenas de éxito, desde que iniciase su camino en 2004 de la mano de la cadena Fox. 

 

La serie House MD transcurre en el Hospital Universitario Princeton-Plainsboro de Nueva Jersey, centrándose en un equipo de diagnóstico llevado por el mejor médico del hospital, el doctor Gregory House. Este equipo se centra en los casos más raros y difíciles de diagnosticar.

Esta es la serie en “teoría”. Lo cual, quizás, sea un tema llamativo para un amplio público, pero… ¿Qué hace esta serie diferente a las demás? El principal motivo, aunque hay muchos, es el propio Gregory House. Más allá de que sea el mejor médico de diagnóstico y de que sea un genio, House es uno de los personajes más queridos de la televisión por su personalidad. Arrogante, egoísta, rebelde, soberbio, negligente, obsesivo, antipático… En definitiva, alguien con quien no querrías cruzarte y mantener una conversación.

Un ejemplo de la personalidad de House es su equipo de diagnóstico (cambia a lo largo de las 8 temporadas) que suele estar compuesto por tres médicos dispuestos a llevarle la contraria a House y, por encima de todo, a soportarlo. De House tienen que soportar insultos, comentarios racistas, de sexo, sociales y un largo etcétera. En su tiempo libre se dedica a investigar la vida de sus compañeros, tanto de su equipo de diagnóstico como de sus “amigos” en el Hospital con el fin de encontrar nuevos comentarios bromistas hacia ellos, en algunos casos llegando a ser verdaderamente ofensivos y sin importarle cuánto de personales puedan ser estos asuntos.

Cuando hablamos de House, estamos refiriéndonos a una persona que destruye todo a su paso: personas, amistades, romances e incluso material médico. Podríamos decir que, al igual que el caballo de Atila, por donde pasa nunca crece la hierba. Su mejor y único amigo es el jefe de oncología del Hospital, James Wilson. Todos los problemas, dilemas morales, alegrías… son escuchados por su incansable amigo, aunque rara vez le hace caso o le escucha. Es, también, su compañero de juegos, en ocasiones infantiles y peligrosos, donde mantienen una lucha por proclamarse vencedor del reto o la apuesta. Wilson es todo lo contrario a House. Es ejemplar, correcto, compasivo, comprensivo, tolerante… En definitiva, si tuviéramos que definir la amistad, éste seria el ejemplo perfecto, exagerado, donde House seria la parte dañina y Wilson la parte positiva de una relación de amistad.

Junto a su equipo de diagnóstico y a Wilson, la directora del Hospital, Lisa Cuddy es la única persona importante para House. Con Cuddy mantiene una relación que va más allá de la amistad. No sabría muy bien definir qué es lo que quiere House con Cuddy, puesto que él mismo lo desconoce. Cuddy es la principal responsable de que House siga ejerciendo como médico, ya que soporta todas las negligencias médicas que comete cada vez que trata a un paciente. Es capaz de soportar todo esto, por un lado porque haciéndolo salva muchas vidas, pero también porque le quiere.

Todos los personajes cercanos a House tienen algo en común: sienten pena por él. House, se deshumaniza cuando lo operan de su pierna y queda cojo para el resto de su vida. El dolor que sufre en la pierna, le lleva a tratar así a todo el mundo. Este dolor, es también el que le inicia a tomar vicodina, volviéndolo un adicto. Junto a su bastón, lo veremos cojear por todo el Hospital durante toda la serie y nos será imposible contar cuantas veces hace uso de su bote de pastillas. Es muy común verle en su tiempo libre, acompañado de prostitutas, con algunas de ellas llegará incluso a intimar y emprender una especie de “relación” absurda.

Como habréis podido comprobar, House es una persona única, pero también un médico único. Su método para diagnosticar es digno de mencionar. Siempre sigue el mismo ritual: muestra el historial a su equipo y a continuación, estos empiezan a sugerir posibles enfermedades que puede sufrir el paciente. Siempre utiliza una pizarra blanca donde escribe las posibles enfermedades y va tachando las descartadas. Él solo se dedica a pensar la solución al rompecabezas, porque así es como ve a sus pacientes, puzzles sin resolver. Rara vez, realiza las pruebas necesarias a los pacientes y por supuesto, casi nunca toma contacto con el paciente, para él es algo innecesario y perjudicial ya que, según él, “todo el mundo miente”. Argumentado por ese pensamiento, no cree en la palabra de los pacientes y por ello, siempre manda a su equipo a investigar el domicilio del paciente, infringiendo la ley. También suele pecar de prejuicios, si un paciente es adicto, su enfermedad estará relacionada con el consumo de drogas, por ejemplo.

Al igual que siempre sigue los pasos mencionados, House, tiene su propio ritual para poder resolver los casos. Nunca lleva su bata de médico, lo detesta, pese a ir bien trajeado, nunca calza zapatos, lleva unos tenis deportivos. Cuando se le resiste un caso, se concentra lanzando contra la pared de su despacho una pelota de tenis, o manteniente conversaciones con Wilson, aunque sean temas ajenos al paciente. En múltiples ocasiones muestra el rechazo a la existencia de algún Dios o milagros. Para él todo tiene su explicación y hará lo posible por demostrarlo, incluso mantener conversaciones con los pacientes, donde no mostrará consideración alguna y será siempre directo y contundente.

Otro ejemplo de lo deshumanizado que encontramos a este personaje es el gran odio a pasar consulta. Esto implica tener contacto con el paciente y, como ya he dicho antes, esto no entra dentro de los planes de House, ni mucho menos. Tal es el odio que, incluso, la doctora Cuddy castiga sus negligencias con horas de consulta.

En definitiva, House MD es la historia de un personaje deshumanizado y su proceso de humanización que pasará por situaciones diversas: reflexiones planteadas por sus compañeros, pacientes, su estancia en un manicomio, en una carcel y un largo etcétera que acontecerá a lo largo de sus ocho temporadas. Es imposible no comparar el personaje de House con su inspirador, Sherlock Holmes, con el que comparte su drogadicción, su arrogancia y sus dotes de investigador, entre otras muchas cosas. El propio productor de la serie consesó que el personaje de House era un sutil homenaje a Sherlock Holmes.

Valoración: 8.5/10
Su nota en Filmaffinity: 7.7, hace honor a la serie. Dejo muchos temas en el aire que no he podido abarcar, dada la extensión de la entrada. ¿Un médico drogadicto: paradoja? ¿Por qué cambian continuamente los médicos de su equipo? ¿Medicina versus Religión? ¿Es preferible un médico que salve la vida a un trato más humano? Os animo a que respondáis todas estas preguntas y las que queráis sugerir comentando este post. Un saludo blogueros y hasta el próximo Jueves.