Mi
siguiente crítica va dirigida a los famosos anuncios de COCA-COLA, ya que se ha
convertido en la marca más presente a nivel mundial. Ese logro es debido a la
fórmula de Duración + Trayectoria =
Éxito.
Si nos fijamos bien, en los anuncios de Coca-Cola siempre se
ve el producto, lo cual hace recordar la marca siempre. Un error de la
publicidad es cuando el anuncio es bueno pero el consumidor no consigue
recordar el anunciante.
Los logros de la campaña de comunicación de Coca-Cola han
girado en torno a una sola palabra: FELICIDAD. No es más que una bebida, pero
la gente se identifica con ella. La Coca-Cola nos habla de un mundo feliz y nos
identificamos con ella: “queremos ser felices”. Saben cómo tocar la fibra
sensible de los telespectadores, el arma de consumo más eficaz.
Otra de las estrategias es que no utiliza a actores, sino a
personas reales y transmite mensajes conmovedores y el verdadero sentido de la
vida, pero los buenos sentimientos no deberían de nublarnos la razón, ni por
ello incitarnos al consumo.
A continuación os muestro uno de los anuncios más
enternecedores que ha sacado a la luz Coca-Cola.
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